
Parte 2: Arma.
Todas estas ciudades de las que puede enamorarse y desea hacerlo pero sigue disparando haciendo el gesto con la mano, diciendo lejanía qué bien fea es esa palabra pero también qué real. Venga con lo mismo, con estos sueños vívidos, estas realidades incómodas, una suerte de revelación en estos días eternos, demasiado calurosos para este mes tercero del calendario. Desea terminar este día. Que vuelva el cordero que le redime. y no le cabe duda de que podría habitar sus calles pero tendría que disparar primero sobre ellas.