Es igual que tus zapatos sean viejos

Hoy estás en la antesala de aquello que llevas anhelando tu existencia entera. Después de no pocos inconvenientes y alguna caída en estilo libre has decidido no posponer más tu cometido. Es hora de dar dirección a tus deseos. Mañana no es un septiembre cualquiera en la rutina de las semanas futuribles. Mañana es el gran comienzo de la vida que te mereces. Por supuesto que no estará exenta de trabajo pero será un esfuerzo recompensado. Una gran sonrisa, de estar seguro o de ser fuerte, te aguarda en tu preciada meta. Cuanto más te entregues a tus pasiones más se extenderán las comisuras. Será un gesto que te arropará como lo hacen las amistades y a base de escuchar su carcajada se hará perdurable en tu memoria. Por eso mañana tiene que ser septiembre. Para que prosigas este sendero de tropiezos con la intención fija en un abrazo inquebrantable.

Parte 2: Tantear
 Las corazonadas tienen la gran ventaja de conocerte por dentro. Han de darte la mano en la penumbra de la incertidumbre. El espacio que las alberga es sin duda tu mayor aliado porque nunca se haya lejos de lo que tu vida necesita.